Los cestos para frutales de estilo granja evocan una estética rústica y acogedora, combinando funcionalidad con atractivo decorativo para exhibir frutas de manera que resalten su calidad natural y frescura de campo. Frecuentemente fabricados en madera o plásticos que imitan madera, estos cestos presentan acabados envejecidos, laterales ranurados o diseños inspirados en lo vintage, conectando con clientes que buscan productos artesanales o de origen local. A pesar de su apariencia decorativa, están construidos para durar, con estructuras resistentes capaces de contener cantidades moderadas o grandes de manzanas, duraznos o ciruelas. Su diseño abierto permite un fácil acceso a los clientes, al tiempo que favorece la circulación del aire para mantener las frutas frescas. DOLADISPLAY integra este estilo en sus soluciones para el comercio minorista, reconociendo que los cestos para frutales de estilo granja generan una conexión emocional, alineándose con las preferencias de los consumidores por imágenes auténticas de productos frescos y locales en supermercados y tiendas especializadas.